Primero decidieron hacer huelga junto los empleados de Renfe y autobuses públicos; luego convocaron un paro de 24 horas en plena festividad de la Mercè; y ahora toca dificultar la movilidad en día en que el Barça y el Madrid se enfrentan en el Camp Nou.
El próximo 7 de octubre, los trabajadores del metro de Barcelona tienen previsto impedir la circulación de los convoyes en diferentes franjas horarias. Así, y a la espera de que la Generalitat decrete los servicios mínimos, el comité de empresa ha decidido paralizar el servicio de metro entre las 9.19 y las 12.19 horas, así como entre las 16.44 y las 19.44 horas. Es decir, antes del partido de fútbol, que dará comienzo a las 19.50 horas. En cuanto a los paros previstos una vez acabado el encuentro, serán de 21.50 a 00.50 horas, y para el turno de noche, de 3.00 a 7.00 horas.

El Camp Nou tiene la capacidad de albergar 98.000 aficionados y, con toda probabilidad, el domingo 7 de octubre no quedará ni un asiento libre en el estadio, entre seguidores del F.C. Barcelona y del Real Madrid.

Teniendo en cuenta la estimación dada por Transports Metropolitans de Barcelona de que entre un 10 por ciento y un 12 por ciento de los asistentes utilizan el metro al salir del campo, se prevé que unas 9.800 personas se vean obligadas a buscar alternativas para desplazarse. Sólo unos amplios servicios mínimos, como los decretados en las últimas huelgas, podrían evitar una estampa como la vivida hace unas semanas cuando miles de aficionados deambularon durante horas por las calles de la ciudad al haber acabado el servicio de metro antes del final del partido, que enfrentó también al Barça y el Madrid con motivo de la Supercopa.

El motivo de la convocatoria es el mismo que el de las anteriores. Los trabajadores rechazan de plano la aplicación del Real Decreto 20/2012 del Gobierno. Los empleados se oponen a que se les baje el sueldo y consideran que la normativa imposibilita la negociación colectiva y un posible acuerdo de convenio colectivo.

Como los trabajadores del metro, también se han expresados los autobuseros de TMB. De hecho, fueron a la huelga junto al metro y Renfe y ya han convocado un nuevo paro para el próximo lunes 1 de octubre, cuando se ponga en marcha la nueve red ortogonal de líneas de autobuses de la Ciudad Condal.

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