El Juzgado de lo Social número 1 de Gáldar (Gran Canaria) ha condenado por segunda vez al Ayuntamiento de esa localidad por prácticas antisindicales contra UGT, por retrasar, de manera injustificada, el abono a esta organización de las cuotas sindicales retenidas a sus afiliados.

La sentencia considera probado que el Ayuntamiento de Gáldar retuvo en la nómina a sus empleados afiliados UGT sus cuotas sindicales de enero, febrero, mayo y agosto de 2011 -tal y como le obliga la ley-, pero no se las transfirió al sindicato hasta el 30 de enero de este año, cuando ya se había abierto un litigio.

Esos hechos fueron reconocidos expresamente por el Consistorio, que depositó en el Juzgado los 9.661 euros reclamados por la UGT por esos cuatro meses, pero el sindicato pidió después a la juez que también condenase a Ayuntamiento a transferirle sin más retrasos las cuotas de octubre, noviembre y diciembre de 2011 y enero de 2012.

El Juzgado condena al Consistorio a abonar a UGT otros 11.212 euros por ese concepto y le ordena que cese de «inmediato» en ese «comportamiento antisindical».

En los fundamentos de la sentencia, la juez recuerda al Consistorio que ya le condenó en 2008 por hechos similares.

«Tras aquel primer procedimiento judicial, el Ayuntamiento, nuevamente, culpable y negligentemente, continúa sin abonar las sucesivas cuantías mensuales que se retenían en las nóminas de los trabajadores, generándose una nueva deuda a favor del sindicato (…) y obligando nuevamente a UGT a litigar», asegura la juez Mercedes González Jiménez.

En un comunicado, UGT personaliza en el alcalde de Gáldar, Teodoro Sosa (NC), la conducta antisindical que este fallo achaca al Consistorio.

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