ERE en Precon: Afiliados de la CIG reciben las primeras cartas de despido


La empresa Precon, dedicada a la fabricación y montaje de prefabricados de hormigón, ubicada en Vilanoviña, término municipal de Meis, ejecuta un ERE (expediente de regulación de empleo) extintivo que permitirá despedir a 30 de las 110 personas que actualmente tiene en plantilla, por razones económicas, productivas y organizativas.
Los trabajadores comenzaron a recibir el pasado viernes las cartas de despido aunque, según denuncia el sindicato CIG, aún no se sabe el nombre de todos los afectados dado que el ERE se ha negociado a nivel nacional y el comité de empresa local no ha dado información.
El secretario de CIG en O Salnés, Xoán Xosé Bouzas Aboi, denuncia que la empresa aprovecha el ERE para deshacerse de los trabajadores más reivindicativos, concretamente afiliados a este sindicato que formaron parte de su lista en las últimas elecciones sindicales.
El sindicalista reconoce que la empresa, por sus características, no puede hacer stocks y trabaja sobre pedido, siendo sus principales clientes las obras públicas y las grandes construcciones de naves industriales; un mercado que por la crisis económica está en recesión. También sabe que, por los datos oficiales del grupo empresarial en los últimos años ha reducido su margen de beneficio, pero puntualiza que aún así continúa dando dividendos a sus socios.
El grupo Precon está compuesto por diez empresas repartidas por todo el territorio nacional, siendo la única gallega la asentada en Vilanoviña. Se trata de una planta con alta capacidad técnica que desarrolla todos los procesos de los prefabricados de hormigón hasta su transporte al cliente. Pero el sindicato CIG no ha podido conseguir datos sobre esta fábrica en concreto ya que Precon los aporta con el global de las 10 fábricas españolas. De hecho, el expediente de regulación de empleo extintivo también lo presentó a nivel general el pasado mes de julio en Madrid, para el despido de 201 de los 615 trabajadores de la plantilla global.
Finalmente, tras una negociación en la que por parte sindical se creó un comité intercentros, el ERE extintivo se aprobó para 168 empleados. El caso es que no se ha desglosado por plantas y, por lo que sabe el responsable de CIG Salnés, en Vilanoviña estarían afectadas unas 30 personas. De estas, 5 serían trabajadores de oficina; 18 oficiales de primera y de segunda y 12 especialistas.
«Se presentó el ERE extintivo en Madrid para cortar cualquier movilización de los trabajadores. Además el período de consultas se desarrolló entre el 15 de julio y 15 de agosto, en plena época de verano; la empresa jugó a eliminar el posible contacto con la plantilla» declaró Bouzas Aboi.
El acuerdo del ERE extintivo fija una indemnización de 28 días por año trabajado con un tope máximo de 12 mensualidades, en el caso de los trabajadores que llevan menos tiempo en la empresa, y de 18 mensualidades para los más antiguos. El ERE es efectivo a partir del 31 de agosto y la empresa puede prolongarlo hasta el 30 de noviembre. El sindicato denuncia que el grupo Precon, en el documento final, deja abierta la posibilidad de decidir el cierre de algún tipo de servicio en caso de considerarlo necesario por razones organizativas.
Tras la aprobación del expediente extintivo se abrió un período de una semana por si había gente que quisiera acogerse voluntariamente. En Vilanoviña, según CIG, hubo cuatro personas.
Bouzas Aboi recordó que Precon presentó el año pasado una propuesta para reducir costes en mano de obra directa de fabricación con dos posibilidades; reducción de salarios o rescisión de contratos. Ninguna de estas medidas fue aceptada por los trabajadores. «La empresa salió por la tangente y al final despidió a 12 trabajadores el año pasado. Ahora vuelve con una caza de brujas, despidiendo a afiliados de CIG, ante el silencio del comité de empresa monocolor de CC OO», declaró Xoán Xosé Bouzas.
El sindicalista recordó que algunos de los despidos fueron recurridos y hubo readmisiones, pero ahora esos nombres vuelven a estar en el ERE.
Pero también denuncia que, con el ERE aprobado, sin conocerse los nombres de todos los trabajadores afectados, ya que el comité de empresa no los facilitó a CIG, la dirección de Precon indicó a los trabajadores de oficina sometidos al expediente de rescisión que si aceptaban bajarse el sueldo no tenían que despedirlos.
El sindicalista explica que todas estas cuestiones están creando un mal ambiente en la planta de Vilanoviña y hay trabajadores que expresaron su temor a posibles represalias si protestan o se manifiestan abiertamente en contra de las medidas adoptadas por la empresa.
El responsable de la Confederación Intersindical Galega en la comarca ha puesto de manifiesto que el grupo Precon, con sus diez plantas en España, pertenece al grupo Molíns que tiene actividades industriales por diversos países del mundo. Este grupo, según los datos publicados de forma oficial, ha aumentado sus beneficios en los últimos años. «El grupo está dando beneficios, los accionistas repartieron dividendos en 2011, pero despide personal. El Gobierno no puede tolerar esto», dijo Bouzas.

http://www.farodevigo.es/portada-arousa/2012/08/26/precon-somete-ere-extintivo-treintena-trabajadores-planta-vilanovina/677258.html

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