Hace dos días, Juan Luis Cebrian daba una conferencia en el Hotel Ritz de Madrid, mientras en la puerta un grupo de trabajadores de Cinco Días atronaban con sus pitos y sus gritos de protesta. El presidente del Grupo Prisa no se inmutó durante el tiempo que duró su intervención y justificó, una vez más, los despidos colectivos que se ejecutarán en Prisa Brand Solutions, Prisa Revistas o Cinco Días, por la caída de la publicidad. Manifestó que su preocupación era la pervivencia del grupo y explicó que los periódicos mantienen estructuras insostenibles ante los nuevos tiempos. Ni una gota de autocrítica, la dirección de la empresa no tiene ninguna responsabilidad en el agujero financiero de su grupo. La culpa es de la publicidad y del gran número de trabajadores que tienen que mantener.
El próximo miércoles termina el plazo de un mes que empresa y trabajadores tienen para llegar a un acuerdo sobre los despidos que pretenden ejecutar y, si nadie lo remedia, se cumplirá con las tres empresas en huelga. La intención de la directiva de ceder lo justo, pensando en los recortes que esperan hacer en el resto del grupo, impide llegar a un acuerdo a pesar de la buena voluntad de los trabajadores.
Cinco Días comenzó la huelga el pasado miércoles y pretende mantenerla hasta el domingo a pesar de las amenazas por parte de la dirección. Ayer la empresa les manifestó que si no desconvocaban la huelga inmediatamente, ejecutarían el ERE tal y como está presentado, perdiendo las mejoras que han conseguido en tres semanas de conversaciones: 23 despidos en lugar de 27 y 26 días de indemnización por año en lugar de los 20 iniciales. La asamblea de trabajadores aprobó con rotundidad mantener la huelga y no ceder a la presión.
Prisa Revistas ha anunciado que celebrará huelga la próxima semana. El pasado martes estaban a punto de firmar un acuerdo, que pusiera fin al despido colectivo, con indemnizaciones superiores a 30 días por año, pero la empresa se echó atrás en el último momento sin dar explicaciones. Una de las cuestiones que más molestan a la plantilla es el hecho de que pretendan despedir a la mitad pero ni a un sólo directivo. Tampoco entienden que no hayan reducido la cifra de despidos, sólo recolocarían a cuatro trabajadores de los 45, en alguna empresa del grupo, pero pretenden que el mismo trabajo se haga con la mitad de plantilla.
Por su parte, Prisa Brand Solutions, empresa encargada de la publicidad, está hoy de huelga, tras rechazar la última propuesta de la empresa, treinta días de indemnización por año.
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