Los trabajadores de Elmar, que esperan conocer hoy la resolución de la Dirección General de Trabajo sobre el expediente de extinción de sus empleos presentado por el Grupo Pescapuesta, han presentado ante Sanidad una nueva denuncia por lo que consideran utilización fraudulenta del sello sanitario de la empresa ubicada en León.
La empresa portuguesa Cominfish, ubicada en Guimaraes, ha puesto en el mercado una partida de productos del mar congelados (pulpo, paella, gamba a la gabardina y raba, productos que también se elaboraban en Elmar) con el sello sanitario de la fábrica leonesa. Esta empresa mantiene una deuda con el Grupo Pescapuerta, y produce algunos productos que distribuye la compañía gallega.
Varios trabajadores de Elmar han adquirido productos en supermercados leoneses con el sello 1452 (elaborado en la semana 52 del año, con la plantilla leonesa ya afectada por los expedientes de regulación de empleo).
A principios de enero los trabajadores ya denunciaron una situación similar, aunque entonces la empresa alegó que se trataba de productos semielaborados; pero que habían sido también envasados en la factoría portuguesa. «Es la segunda vez que lo denunciamos, nos preguntamos por qué no se han tomado medidas», señalaba ayer Ricardo López, representante de los trabajadores de Elmar.
López adelantó también que tienen la intención de llevar a analizar los productos adquiridos que tienen este sello de forma que ellos consideran fraudulenta; y que pedirán responsabilidades si se detecta cualquier irregularidad. Mientras, esperan una respuesta por parte de la Junta de Castilla y León, ante la que han denunciado los hechos.
Tres inspecciones. Por su parte desde la Delegación Territorial de la Junta en León se asegura que «por iniciativa del propio delegado, Guillermo García», los veterinarios del servicio de Sanidad han realizado ya tres inspecciones, y que esperan conocer sus resultados para adoptar las medidas oportunas. Desde la Junta se asegura que «cualquier irregularidad que se detecte, en el caso de que así sea, será sancionada convenientemente».
Los trabajadores de Elmar ya denunciaron desde finales del año pasado que apenas entraron en vigor los expedientes de regulación de empleo para la plantilla en León el Grupo Pescapuerta, propietario de la fábrica, había desviado parte de la producción que se realizaba en el polígono industrial de León hacia otras factorías que trabajan para el grupo.
Actualmente la plantilla está pendiente de la resolución de un expediente de extinción de empleo para 179 trabajadores de la fábrica leonesa. Los trabajadores defienden no sólo la viabilidad de la empresa, sino la ilegalidad de las actuaciones llevadas a cabo por Pescapuerta en los últimos meses.
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