El nuevo objetivo de la Inspección de Trabajo es el control del personal contratado irregularmente para los banquetes de ´bodas, bautizos y comuniones´. Más de una docena de funcionarios están recorriendo las islas durante los fines de semana para intentan detectar la presencia de los denominados ´extras´, es decir, de aquellas personas que se utilizan en el marco de la economía sumergida para reforzar las plantillas de algunos hoteles y restaurantes para atender las citadas celebraciones.
La campaña de controles se inició en mayo y se va a mantener durante todo el mes de junio. Y los resultados que se están consiguiendo hasta ahora están siendo óptimos desde el punto de vista cuantitativo: la cifra de trabajadores en situación irregular que se está detectando es elevada, según se asegura, aunque no se hará pública hasta que concluya esta iniciativa.
Desde los sindicatos no se oculta que la existencia de los denominados ´extras´ está fuertemente implantada en las islas por el aumento de la demanda que muchos establecimientos de hostelería reciben durante los fines de semana, y especialmente en mayo y junio por la concentración de bodas y comuniones.
El problema radica en que esta tendencia ha registrado un fuerte repunte de mano de la crisis económica. La caída en el consumo ha hecho que se haya entrado en una guerra de precios a la baja, respaldada en ocasiones por reducciones de costes por la vía de saltarse la legalidad. Porque para alguno de estos negocios, la concentración de bodas y comuniones durante mayo y junio hace que estos meses sean fundamentales para el resultado del conjunto del año.
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