El pasado 21 de mayo de 2013 se pronunció el Tribunal Supremo(órgano que se encuentra en la cúspide del poder judicial) por primera vez  en un caso de despido de un compañero de Ayesa Advanced Technologies. Nos hemos de congratular porque, tras más de dos años de periplo por los juzgados, el Tribunal Supremo le ha vuelto a dar la razón al compañero de Madrid, Manuel P., declarando nulo su despido al igual que se dictaminó en anteriores instancias (1ª instancia y en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid).  

Es muy importante el resultado de esta sentencia ya que se produce en el Tribunal Supremo, lo que la hace definitiva y sin posibilidad de recurso por parte de la empresa. Además, esta sentencia sienta precedente para futuros casos de despido con lo que supone un paso muy importante para otros casos similares que se están resolviendo en el TS.

Queremos hacer ver y recalcar que gracias a la decisión firme y valentía del compañero a la hora de defender su puesto de trabajo – y con la ayuda y asistencia de la mayoría del Comité de Empresa -, éste ha conseguido que se respeten sus derechos como trabajador. Sin una actitud de lucha, de determinación y sin la solidaridad de los compañeros del Comité de Sevilla y, sobre todo de Madrid, probablemente nuestro compañero estaría ahora en la calle.

Este gran logro para los trabajadores de Ayesa Advanced Technologies, como es la defensa del puesto de trabajo, demuestra que con organización, determinación y lucha se pueden conseguir grandes cosas porque esta sentencia sienta la base para la defensa de los despidos que aún están dilucidándose en los juzgados así como para los próximos despidos que pudieran venir. Por tanto, esta victoria no es sólo del compañero Manuel P. sino que es extensible a todos los trabajadores actuales de Ayesa Advanced Techologies, así como de los compañeros que fueron despedidos.

Aun así, debemos ser conscientes de que, para conseguir avances reales en nuestras condiciones, sólo nos tenemos a nosotros mismos y no podemos esperar a que la justicia nos dé la razón cuando nosotros ya sabemos que la tenemos. ¡LUCHEMOS POR ELLA!