La Fiscalía especializada en siniestralidad laboral en la provincia de Alicante ha abierto media docena de investigaciones desde diciembre de 2010 hasta julio de este año por accidentes con fallecidos o lesiones graves. En los últimos siete meses la tendencia en la apertura de investigaciones ha dado un giro y son ahora los accidentes del sector industrial, y no los ocurridos en la construcción, los que centran la actividad del Ministerio Público, pese a que en números absolutos es el sector servicios el que sigue concentrando al cabo de un año el mayor número de siniestros laborales, incluidos los fallecimientos y los de mayor gravedad.
Según fuentes de la Fiscalía, mientras que un alto porcentaje de investigaciones abiertas en los últimos tres años se referían a caídas en obras, en los últimos meses los accidentes mortales se han centrado en la industria, sector en el que la Fiscalía juega un papel fundamental a la hora de hacer aflorar la economía sumergida, un trabajo en el que se requiere la coordinación de un conjunto de entidades, entre ellas sindicatos, inspección de Trabajo y Hacienda. El número de diligencias abiertas por los presuntos delitos de homicidio imprudente o lesiones por imprudencia en el sector industrial ha aumentado desde finales de 2010. Entre ellos, figuran un trabajador que falleció en una cardadora de lana en Alcocer de Planes en enero; un fallecido en una cantera de mármol en La Encina o un trabajador que quedó herido grave al caerle en Elda un rollo de fibra de vidrio de 260 kilos en mayo.
Según el secretario de comunicación de CC OO, Salvador Roig, la disminución de los accidentes laborales en la industria no es paralela a la disminución en la ocupación en el sector. «Según las estadísticas, ya que en esta provincia existe un volumen muy alto de economía sumergida en el sector industrial (textil y manufacturero) la siniestralidad se oculta directamente». Añade que durante 2010, de los 4.545 empleos aflorados por la inspección de trabajo, 2.621 corresponderían al sector industrial.
«Es evidente que existe una bolsa muy elevada de empresas en la economía sumergida en los que los planes preventivos que se aplican y los accidentes de trabajo no cuentan a nivel estadístico» añade Roig.
Tanto CC OO como UGT destacan que en la actualidad las empresas ajustan o rebajan los presupuestos dedicados a los planes de prevención y que en un contexto tan negativo para el empleo se produce una rebaja de las condiciones de trabajo que, según Roig, «por temor a los despidos no se denuncian». «Hemos detectado también en este sector que se intenta enmascarar los accidentes de trabajo por enfermedades comunes», explica.
Por su parte, desde UGT, su secretario comarcal, Óscar Llopis, incide en que la relajación por parte de las empresas a la hora de poner en práctica medidas de salud laboral «es preocupante».
Descenso ligado al paro
La siniestralidad laboral ha descendido en el último año y medio fruto del descenso de la actividad laboral, aunque el nivel de accidentes no ha disminuido en la misma proporción. En lo que llevamos de año se han producido en la provincia de Alicante siete accidentes mortales (un 30% menos respecto al mismo periodo de 2010) y 61 graves (10% menos) de un total de 6.303 (11% menos), según datos aportados por UGT.
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